La diabetes y los problemas dentales
La diabetes y los problemas dentales
La diabetes se caracteriza por un aumento de los niveles de glucosa en sangre. Ya sea porque el páncreas no produce insulina (déficit absoluto o relativo), ya sea porque el organismo no la utiliza adecuadamente.
Es la enfermedad endocrina más frecuente y una de las principales causas de morbilidad y de mortalidad en la sociedad contemporánea, con un elevado coste social y un gran impacto sanitario.
Según datos del primer estudio epidemiológico sobre diabetes realizado en el ámbito nacional, en España, un 13,5% de la población adulta padece diabetes, si bien un 8% de la misma lo desconoce.
El paciente con diabetes presenta distintas complicaciones que lo convierten en un paciente especial.
¿Como ocurre esto?
La diabetes hace que las bacterias ingresen al torrente sanguíneo y activen células que producen signos biológicos inflamatorios, que poseen un efecto destructor en todo el cuerpo. En el páncreas, las células responsables de la producción de insulina pueden ser dañadas o destruidas. Una vez que esto sucede, se puede disparar una diabetes del tipo 2. También incluso en individuos sanos que no presenten otros factores de riesgo por diabetes.
Si tengo diabetes, ¿estoy en una situación de mayor riesgo en relación con los problemas dentales?
Si los niveles de glucosa en sangre no son controlados correctamente, usted tiene mayor riesgo de desarrollar enfermedad de las encías y de perder más piezas dentales que las personas no diabéticas. Como todas las infecciones, la enfermedad de las encías puede ser un factor que provoque un incremento del azúcar en sangre y haga que sea más difícil de controlar la diabetes.
En la cavidad oral, la diabetes puede causar:
- Alteraciones en las glándulas salivales: xerostomía (40-80%) e hinchazón bilateral asintomática de las glándulas parótidas (24-48%)
- Caries dental
- Cicatrización lenta de las lesiones bucales
- Disgeusia (sensación de gusto metálico)
- Enfermedad periodontal
- Glosodinia o síndrome de boca ardiente
- Infecciones fúngicas (candidiasis oral)
- Liquen plano y reacciones liquenoides (provocadas por algunos fármacos antidiabéticos)